El Gobierno ha dado luz verde al Plan PIVE 8, pero con novedades. La octava edición del programa de ayudas a la compra de coches llega con una dotación de 225 millones de euros (las anteriores han tenido un fondo de 175 millones), pero las ayudas se reducen en 500 euros.
Los 1.500 euros serán aportados, a partes iguales, por el Gobierno (el Ministerio de Industria, Energía y Turismo) y por la marca o punto de venta. Lo que no cambia del octavo Plan PIVE con respecto al PIVE 7 es la ayuda de 3.000 euros (1.500 euros cada una de las partes) para la compra de vehículos por parte de familias numerosas y discapacitados de movilidad reducida que necesiten un vehículo adaptado.
El Plan PIVE 8 mantiene la obligatoriedad de que el beneficiario tenga la titularidad del vehículo a achatarrar (de diez años o más para los turismos y de siete para los comerciales) al menos durante el año anterior a la fecha de solicitud de la ayuda. Una novedad que se introdujo en el PIVE 7. Además, deberá contar con la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) en vigor.
Los vehículos acogidos a las ayudas del PIVE 8 deberán ser nuevos y podrán ser convencionales, híbridos, híbridos enchufables y eléctricos de autonomía extendida. El precio de adquisición no podrá superar antes de IVA o IGIC (en Canarias) los 25.000 euros, salvo para vehículos de más de cinco plazas o para discapacitados que asciende a 30.000 euros. Si se trata de un eléctrico puro, híbrido enchufable y de autonomía extendida la tarifa no podrá rebasar los 40.000 euros. Para los turismos convencionales (gasolina o diesel) que se encuentren clasificados como clase energética B y cuenten con emisiones de CO2 homologadas superiores a 120 g/km el precio tope será de 20.000 euros.
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