Algunos elementos de tu coche que no debes olvidar en otoño

El verano es fantástico. Largos días de sol, vacaciones para los más afortunados, máxima visibilidad en la carretera… ¿Quién se acuerda del sistema limpiaparabrisas, del agarre de los neumáticos o de los faros en momentos así? 

Por suerte para ti, tu taller de confianza los recuerda en todas las revisiones que efectúa a tu coche, incluida la veraniega. Con la llegada del otoño, conviene que tengas en cuenta algunos elementos de tu vehículo que se pueden haber deteriorado en los últimos meses sin que te hayas dado cuenta.

- Sistema limpiaparabrisas: siempre es importante circular con él en buen estado, porque una tormenta inoportuna nos puede sorprender en cualquier momento del año. Sin embargo, en otoño es fundamental que funcione correctamente por la aparición de las lluvias. Revisa el funcionamiento de las escobillas y asegúrate de que dispones de suficiente líquido lavaparabrisas. ¿No sabes cuándo debes cambiar las escobillas? Aquí te lo contamos.

- Faros: las noches se alargan, los días encogen y las horas de luz disminuyen. Además, el mal tiempo afectará a tu visibilidad y a la del resto de usuarios de la vía. Vas a hacer un uso intensivo del sistema de alumbrado de tu coche en los próximos meses, así que debes comprobar las luces de carretera, las de cruce, las de posición, las de freno, la de marcha atrás y los intermitentes.

- Luneta térmica trasera: que no la hayas utilizado desde el mes de febrero no quiere decir que se haya conservado en perfecto estado desde entonces. Intenta probarla en un lugar en el que haga más frío fuera que dentro del vehículo para que se forme vaho. Si no funciona, acude a tu taller de confianza.

- Neumáticos: su agarre es muy importante, especialmente cuando aparece la lluvia. Si ves que la profundidad de su dibujo es menor de 3 mm, deberías cambiarlos. Si es inferior a 1,6 mm, es obligatorio que los sustituyas si no quieres exponerte a un accidente y a una multa. Tampoco debes olvidar comprobar su presión.

- Niveles: aceite de motor y refrigerante deben estar en buen estado y al nivel necesario. 

- Batería: no querrás quedarte sin batería en un día lluvioso en el que lo último que te apetece es ir andando. Si observas algo sospechoso en los bornes o tiene más de cinco años, conviene que te pases por tu taller de confianza a que comprueben su estado.

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